Ganamos y Goleamos

Temerosos 4 - Defensa y Justicia 1

Está bien, no gustamos demasiado. Y nos faltó la tercera G. Pero loco, ¡¿les parece poco?! Temerosos ganó el tercer partido al hilo con goleada, corriendo mucho, poniendo, y con el record de una plantilla de 21 jugadores. Empezamos bien, sacando una diferencia de dos en el primero y cuando se venía la remontada de Defensa y Justicia, el Bomba frotó la lámpara y sentenció la historia. 10 puntos de 12…! vamos la T!

La tarde se presentaba muy calurosa: 30º grados adentro del campo de juego, y encima en la cancha grande, donde ganamos una sola vez desde que estamos en Don Pedro. Enfrente, venía Defensa y Justicia, en teoría un equipo más joven que los que habíamos enfrentado en la segunda y tercera fecha. Y más corredor y metedor. La consigna fue entonces intentar seguir con un equipo corto, y hacernos dueño del trámite del partido desde el medio campo, jugando con tranquilidad sobre todo en el primer tiempo y guardando piernas y fútbol en proporción razonable para el segundo. Volvió Luongo a la zaga central. Sendón volvió al medio con Manu, acompañados de Lea y Manu Robledo. Arriba, Pata y Fede. El trámite fue parejo los primeros minutos pero lentamente fuimos inclinando la cancha. Se tocaba, y se ponía mucha atención a las posiciones definidas. Cuando promediaba la etapa, tiro libre desde afuera del área por la izquierda. Se alistaron Luongo y Lea, y éste último le entró combada al segundo palo, el arquero se esforzó pero la terminó metiendo. Desde afuera vimos justito la comba hermosa que tomó la pelota. 1-0. Y seguimos igual, sin volvernos locos. A los 22, un toqueteo muy lindo que cambió de derecha a izquierda comandado por Pata, encontró a Bata picando al vacío. Recibió solito y la pico por encima del arquero que le salía a achicar desde afuera del área. Golazo. 2.-0.

Nos relajamos en los últimos diez del primer tiempo, y le regalamos a la pelota a ellos, que empezaron a creer que podrían intentar una remontada. Con algunos reproches, y con la sensación que no se nos podía escapar, nos fuimos al descanso (otra vez la heladerita fue la salvadora, agua fresca para mitigar el calor). El segundo tiempo empezó en esa tónica. Metimos cambios: Salió Sendón y entró Aguirre. Y entraron el Bomba por Pata y Klein por Manu. Ya había entrado el Negro por Fede y Walter por Javi en el primer tiempo, en ambos casos por golpes. Nos metimos atrás, les dejamos los espacios, y no tardó en llegar el descuento, de penal.


Aunque no lo veamos…

Se venía la noche. Se nos acercaban, no encontrábamos la pelota y además habían empezado otra vez los nervios y la lengua suelta- En la semana voy a escribir sobre esta manía que tenemos de gritarnos en vez de alentarnos. El Bomba no se encontraba con Enzo, que había entrado por el Negro. La cancha era muy grande, y la magia no aparecía. Pero sí aparecían las puteadas, porque no le salía una. Pero el fútbol tiene estas cosas y siempre da revancha, como dice mi amigo Fernández. En el apogeo de los insultos, cuando hacíamos ingentes esfuerzo para alentar al equipo, que se caía por su propia impaciencia e intolerancia, cuando menos salían las cosas, el Bomba tomó una pelota suelta en tres cuartos de cancha, sacó el suplemento de turismo de Página/12 de la semana pasada, y con eso mismo le pegó. La pelota dibujó, casi calcada, el mismo viboreo del otro sábado y se le metió al arquero entre las piernas. Casi ni lo gritó, de tanta bronca que tenía. Y faltando diez aportó la cuota de talento que le pedimos y le conocemos, cuando la volvió a tomar casi en el mismo lugar, se hamacó hacia la derecha y ante otra salida desesperada del arquero, la mandó a guardar con una definición exquisita. 4-1: asunto liquidado. Parafraseando a Marilina Ross: “aunque no lo veamos, el Bomba siempre está”

Tercera victoria seguida, que rubrica un muy buen inicio de torneo. ¿Cómo no nos vamos a ilusionar? Y si, tengo que tirar la pregunta ya instalada como cábala: ¿lo digo o no lo digo?


Apostillas del sábado

El equipo de José: Hoy firmaron la lista 21 jugadores,. Casi como la lista de José en la selección. Hacía mucho que no teníamos tantos jugadores. Y además fuimos fieles a nuestra tradición de que jueguen todos. Ese es un estigma de la T que queremos respetar a muerte. Y ganamos en esa ley!

195 minutos: Fue el record de la valla sin goles de la T. Narváez lo celebraba con ahínco al costado de la cancha una vez finalizado el partido

Segunda en la grande: Siguiendo con las estadísticas, segunda victoria temerosa en la cancha Nº1, la grande, la que siempre se nos muestra esquiva, la que parecía mufada. La vez anterior había sido un 2-1 a Turistólogos, hace un año.

Paren con los gritos: Hubo más gritos de lo deseable. Algunos rayando la falta de respeto. La gran puta, ¿podemos reflexionar y cambiar esto de una vez? ¿o somos todos Maradonas y Ben Johnsons?

La enfermería: Salieron con molestias Fede, Javi, y Walter con un golpe fuerte en la tibia izquierda. Salió al ruedo la heladerita y el hielo alivió dolores. Parece que no hay nada grave.


Los premios

Premio Serge Blanco: ¿Se acuerdan? Fue un fullback legendario de la selección de rugby de Francia. Su estatuilla se la ganó Saldaña. Cuando el partido estaba 2-1 tuvo que salir a frenar una embestida el 9 de Defensa y Justicia. Le pelota venía cayendo, y Walter saltó como un fullback y recibió una embestida que lo dejó afuera del match.

Premio Mingo Perilli: La estatuilla calva del Mingo va para el Bomba, porque cuando pelaban las papas, y mas lo puteaban, frotó la lamparita y convirtió la pesadilla en goleada. Te banco a muerte gordo.

Premio Massey Ferguson: Para Manu. Fue un tractor que corrió todo el partido en la mitad de cancha