Temerosos 3 - Rapol 3
Dante Panzeri -
prócer del periodismo deportivo argento - tituló a su libro más conocido Fútbol, dinámica de lo impensado,
sintetizando una forma de entender y sentir este juego, pero también definiéndolo
creo que de la manera más precisa.
Que es el fútbol sino lo imprevisible? que
hace tan lindo al fútbol sino la sucesión de hechos inesperados? Porque nos
gusta Messi y Maradona?, será porque uno
espera siempre que saquen de la galera algo que nadie espera, que nadie tiene
en mente excepto ellos?
Es así. El fútbol es la dinámica de lo impensado hasta en su
versión más amateur. El sábado ganamos un punto en un partido que ya casi nos
tenía como derrotados, como víctimas, por esa misma dinámica de lo impensado.
Porque era absolutamente impensado que Gaby pudiera erigirse en una torre
dentro del área y conectar el centro preciso y precioso que envió el perro
cuando el encuentro se moría. Era impensando, cuando faltando quince me di
vuelta y le pregunte:
- pecho, vas a
entrar?
A el se le iluminaron los ojos y me dijo que sí,
enérgico, casi impaciente.
Yo le miré los botines, debo confesar que me desanimé
momentáneamente, y pensé: "... con esos va a hacer pie en esta cancha..??".
El rocio y la lluvia del viernes y el pasto cortado y no levantado hacían un
emplasto que se te pegaba a las suelas, y nuestra torre fría se había venido
con los Total 90 desvencijados de siempre, esos blanco y bordó que creo que
fueron los primeros Nike pitucos que entraron al país todavía en la época del 1
a 1.
Antes, también había sido impensada la forma en que se nos
fue de las manos el primer tiempo, con un gol tempranero y después un penal que
solo vio el línea y la bravuconada del pichón de Lunatti que sabe habitar la
cancha 1 de Iglesias, y que nos llenó de amarillas.
No sé, en cambio, si fue tan impensada la remontada. Primero
el Bomba con un tiro libre como dice el manual en estos casos: bombeado, para
que le pique justo al arquero y que se confunda con los que venían a la carga y
se le meta mansa y rápida (Juró que vi un gol igual del Wolverhampton esta
temporada: centro de James Henry y Edwards que entra a molestar y la pelota
pica y entra igual de mansa y rápida a la red). Y tampoco la igualdad fue
impensada, con el dribbling perruno y la definición al segundo palo, preciosa y
rabiosa. Toda una marca de esa calidad a pincelazos cortos que nos suele
ofrecer Cassola.
Pero después.. después lo perdiamos, macho!... Porque
también es impensado que los dos líneas se equivoquen en contra nuestra, uno en
cada tiempo. Y cuando el partido se moría, cuando ya nos íbamos puteando,
cuando más calor se necesitaba, apareció nuestro pingüino emperador y puso justicia.
Se juega este jueves y hay vacipan after the match. Vayan pidiendo permiso...